Querida Susi, querido Paul

Querido Paul:

Sin ti, el colegio es un aburrimiento. Ahora en tu sitio se sienta Andrea. Se pasa el día vigilando para que yo no ponga mis cosas en su parte del pupitre. Y huele a mantequilla rancia. Ya le he dado dos codazos. La señorita creyó lo que le dije: que lo había hecho sin querer. Ayer estuvieron en casa Andi y Xandi. Jugamos con scalextric. Andi dijo: “Es una faena que los padres se trasladen de una ciudad aunque los hijos no quieran”

Xandi dijo: “¡Siempre pasa lo mismo! ¡Los mayores hacen lo que quieren!” Me encontré a tu abuela en la lechería. Me dijo que fuera un día a visitarla. Pero ¡qué hago yo con tu abuela, si tú no estás allí!

Aún tengo que hacer los deberes de matemáticas. Hoy tenemos muchísimos. Y todo porque Geri y Joschi se han pasado el día hablando y se han reído de lo lindo. Y la señorita se ha cansado. Andi, Xandi, mamá y papá te mandan muchos recuerdos.

¡Escríbeme pronto!

Tu amiga Susi

 

Querido Paul:

Todos los días miro en el buzón. Pero nunca hay carta tuya. ¿Por qué no me escribes? ¿Estás enfermo? ¿O ya me has olvidado?

Hoy me he vuelto a encontrar a tu abuela en la lechería. No cree que estés enfermo. Me ha dicho: “¡Qué va. Lo que pasa es que es un perezoso!”

Si escribir te da pereza, mándame una cinta grabada con tu voz. ¿O también eso te da pereza? ¿Qué tal te va en tu nuevo colegio? ¿Son simpáticos los niños? ¿Tienes profesor o profesora? ¿Y como es tu nueva habitación?

Si no sé pronto algo de ti, me enfadaré en serio.

Tu vieja amiga Susanna

 

Christine Nöstlinger (fragmento libro Querida Susi, querido Paul disponible en Biblioteca Juana Keiser)