El pájaro azul

Cuentan que hace mucho tiempo existió en tierras árabes un rico marajá. Vivía en un palacio de oro y tenía todos los lujos que quería a a su disposición. Sin embargo, siempre tenía la sensación de que le faltaba algo.

Un día recibió la visita de un sabio que le habló de la existencia de un hermoso pájaro de alas azules capaz de otorgar la felicidad. Al marajá se le encendieron los ojos:

¡Es justo lo que estaba buscando!- exclamó emocionado.

No se lo pensó dos veces. Abandonó su palacio y partió en busca de aquel pájaro. Sin embargo, y a pesar de recorrer cientos de reinos, después de varios años buscando sin encontrar al ave, decidió volver a su hogar.

Pensó que aquel sabio le había engañado, pero una noche tuvo un sueño. Y en su sueño vio con claridad al pájaro azul.

Decidió entonces vender su palacio y todos sus bienes para recorrer mundo. Tenía claro su objetivo: tenía que encontrar como fuera a ese pájaro. Así que exploró reinos muy lejanos, durante muchos años.

El marajá regresa a su ciudad

Y cuando ya era anciano, cansado de andar y de buscar, regresó a su ciudad, desilusionado por no haber encontrado lo que buscaba.

Entonces pasó junto al que era su palacio. Y los entonces propietarios, que eran muy caritativos, al verle pasar, le invitaron a alojarse allí con ellos.

Le prepararon una cama en el sótano. Y el marajá, ya anciano, se dejó caer en la mullida cama, muy agradecido.

Estaba muy cansado y sabía que su vida llegaba a su fin. Tenía ese dolor de no haber encontrado al precioso pájaro azul y cerró los ojos muy despacio. Pero entonces escuchó un dulce trinar y a pesar del cansancio, consiguió abrir los ojos de nuevo. Allí, en el sótano, junto a él, cantaba un hermoso pájaro de plumas azules. ¡Estaba más cerca de lo que imaginaba! El marajá sonrió y pudo al fin descansar.